Visita rapida

*Sonrío apenado cuando dice que se la pasa bien conmigo.*
*Me pregunta por la comida.*
- Extraño los dulces. Me encantaban los dulces chinos white rabbit, y los dangos y los manjuus... Extraño sobre todo comer cosas dulces. Pero más que eso extraño dormir. No sé si sepas, pero los vampiros no dormimos. Yo elegí esto, sin saber por completo en qué me estaba metiendo.
*Sonrío de medio lado.*
- No me arrepiento. Aún puedo tirarme en el césped, cerrar los ojos y meditar. Me desconecto de todo y es casi como si estuviera dormitando. De los vampiros que conozco, soy el único que tiene cama, jajajajaja.

*Sonrio*

-Debe ser dificil no poder dormir, con lo rico que es, pero bueno puedes ver todas las cosas que pasan, y ademas no se sienten cansados cierto?

*Mire hacia el techo*

-No yo no podria sobrevivir sin mis dulces

*Pense en que desde que era licantropa comia mas de lo normal y sonrei*

-emmm y tu de que te alimentas no de humanos verdad?

*Dije mordiendome un labio esperaba sinceramente que no lo hiciera, eso tal vez me decepcionaria un poco*

*Río cuando dice que no podría sobrevivir sin dulces.*
- Bueno yo los últimos tres años que comí, viví casi a base de ramen instantáneo.
*Me pregunta por mi dieta.*
- No, no me alimento de humanos. Me alimento de animales. Me gustan los tigres, lo cual me hizo ser blanco de bastantes burlas. Porque en la mitología china, el tigre siempre pelea con el dragón. Lo que no puedo comerme casi son animales herbívoros. Prefiero los carnívoros. En mi cumpleaños si puedo, compro una unidad de sangre humana donada.
*La miro y suspiro.*
- No soy un vampiro tan viejo y a veces me cuesta contenerme, pero lo logro. Por eso aprendí a meditar.

*Tomo su mano entre las mías de verdad es muy frío*

-Haces el intento eso cuenta para mi, te niegas a tu propia naturaleza

*Solte su mano despacio y sonrei*

-Eso es de valientes, la sangre de animales no me agrada, me rehuse desde hace años de volver a comer animales crudos

*Dije cruzando los brazos*

-Aunque se rian de mi, de lobo sigo siendo mujer y eso no me agrada

*Sonrio de lado, nunca me habia sentado a hablar tanto con alguien que no fueran los chicos de la reserva*

*Me conmueve saber que Leah me considera valiente por negarme a comer humanos.*
- A mí me gusta... no toda como te digo. Elijo lo que me como. Haces bien, ya que tienes una elección.
*Sonrío.*
- Yo no podría comerme un humano... no uno inocente al menos. Tal vez uno viejo, enfermo o un criminal...
"Uno de verdad, sin honor."
- Incluso con los animales, en mi clan intentamos no comernos a los alfas ni a las hembras embarazadas.

-Eso me parece gusto

*Sonrei*

-Es respetar el orden de la naturaleza

*Me quede mirandolo*

-Por que Forks? por que vivir aqui de este otro lado del planeta?

*Asiento sonriendo. Sí, justo eso, ser un verdadero depredador.*
*Me pregunta por qué Forks.*
- Bueno, terminé mi carrera allá y quería viajar. Y Australia está muy cerca. Sonará algo estúpido pero quería un lugar con beisbol y Forks es un sitio donde no tengo que ocultarme todo el tiempo para no salir al sol.
*Le sonrío.*
- ¿Y tú Leah? ¿No quieres viajar?

*Levante los hombros*

-Tal vez, pero creo que lejos de la Push no seria completamente yo, estoy acostumbrada a la playa, a los chicos a mi familia

*Sonrei*

-Pero seria grandioso, me gustaria ir lejos a un lugar completamente diferente, seria bueno

*Pense en mi padre, que siempre habia insistido en que viajara pero ahora el no estaba, no pude evitar ponerme un poco triste*

-Hace cuanto eres vampiro?

*Dije tratando de reponerme*

- Pues si alguna vez quieres ir a Japón, te doy asilo en nuestra casa. Hay una zona para humanos, así no aguantas el mal olor.
*La noto pensativa y no digo nada, aceptando el cambio de tema. Hago cuentas.*
- Unos... 8 años más o menos. Soy un mocoso Jajajajaja. Todavía veo a algunos de mis amigos. Tengo la ventaja de que a los japos no se nos nota tanto la edad. Aunque uno sabe.
- ¿Cuánto llevas de loba? ¿Cómo es?
*También me da curiosidad, pero aceptaré si no me cuenta.*

*Sonrio*

-Gracias Kiyoshi

*Me quede pensando*

-Solo cinco años? Si 5

*Levante los hombros*

-Veras es muy muy extraño, las primeras veces sientes como tienes un enojo que no puedes controlar, despues tu cuerpo reacciona de una manera extraña y nada mas sientes como poco a poco dejas de ser tu en parte, no es que te vuelvas irracional solo no puedes controlarte, pero con el tiempo aprendes a transformarte cuando lo deseas, es bueno tener buen olfato, buena vision, fuerza y rapidez

*Sonrei, sin darme cuenta habia llegado a amar lo que era*

-Ademas de la comunicacion por pensamientos con los chicos de la manada

*Lo mire a los ojos y sonrei*

-Ademas soy la mas rapida de los chicos

*Le guiñe un ojo con una leve carcajada*

*Escucho maravillado... Me sorprende particularmente la conexión de manada.*
- Wow... sugoi, increíble. Es tu destino Leah, parte de quien eres.
*Sonrío.*
- Yo debí morir pero tuve otra oportunidad. Me parece bastante hermoso que los lobos estén destinados a serlo.

-Como fue que te convirtieron Kiyo? si se puede saber

*Sonrei*

*Kiyo era muy buena persona, y parecia ser tan natural, tan... genial*

*Miro a Leah y exhalo, viendo por dónde empezar. Pero puedo contarle, es Leah y es una chica increíble.*
- Tenía 17 y estaba en último de bachillerato. Era el líder del grupo. Yankumi era mi maestra. Mis padres me habían echado de casa y vivía solo en un apartamento chiquito. Seguía viendo a mi hermana Natsumi pero no entendí que ella quería salirse también.
*Suspiro.*
- El caso es que Yankumi fue a verme, preocupada porque sabía que no comía bien. Y recibí una llamada de mi hermana. Salí corriendo a buscarla, pero no me dijo donde estaba. Me escabullí de Yankumi y la encontré... en un casino de la mafia. Tuve que pelear con los tipos para rescatarla, pero eran más.
*Bajo la vista.*
- Ella escapó pero a mí... me golpearon bastante fuerte. Cuando ya no podía moverme, llegó Yankumi. Me defendió y luego me cargó y escapó conmigo cuando llegó la policía. Yo sabía que no sobreviviría y aunque quería vivir, me satisfacía saber que Natsumi estaba bien.
*Miro a Leah a los ojos.*
- Yankumi me dio una elección... y acepté que me transformara.
*Río.*
- Luego tuve que estar preso unos días para justificar el tiempo de la transformación pero Yankumi no se dio cuenta que mi padre tendría que firmar los papeles para que me dejaran salir. Casi enloquezco, encerrado y rodeado de humanos... Al final salí y el abuelo de Yankumi me propuso entrar a su clan y que me adoptara. Y estoy mejor...

*Mire expectante toda su historia*

-Increible

*Sonrei*

-Fuiste muy valiente y es una suerte que hayas podido sobrevivir

*Toque su mano y le sonrei*

-Tu eleccion fue por la vida, y pudiste aguantar el estar rodeado de humanos

*Puse la mano en mi mejilla*

-Es extraño llamarlos humanos, siento como si no lo fuera y tal vez no lo soy, o lo soy a medias

*Puse mi mano en mi frente como si me hubiese confundido, sonrei*

-Gracias a lo que somos puedes estar conmigo sin querer comerme, por cierto no huelo demasiado feo para ti? dije demasiado ee?

*Solte una risita*

*La escucho... sonriendo al ver que me comprende.*
- Gracias Leah... significa mucho para mí.
"Significa ser aceptado cuando se supondría que ella y yo deberíamos estar peleando."
- Yo los llamo humanos o mortales... No creo que tú seas humana como ellos, ni yo. Tenemos humanidad pero no somos exactamente como ellos. Y no es malo, cada quien es especial a su modo. A mí como me gusta el rol, uso los términos del juego. Que no es como la vida real, pero se parece más que muchos mitos.
*Río un poco cuando menciona el olor.*
- Supongo que yo huelo menos feo, por el hielo. Jajajaja. Mira, nunca había olido un lobo como ustedes. Conocí un hombre lobo verdadero y daba miedo. Ustedes n o huelen así... Y aparte, no importa eso. Bien sólo te conozco a ti y al Alex lobo y son personas muy especiales. No importa algo tan tonto como el olor...

*Solte una risita*

-Si hueles mucho menos

*Paso una mano por mi cabello, acmodandolo*

-Tu fuiste el primer vampiro que me hablo aun sin necesitar nada de mi, por que a pesar de que Ed me cae bien, establecimos un vinculo por lo de su protección

*Tamborilee con mis dedos en mis regazos*

-Ahora si debo irme

*Sonrei*

-Fue un placer hablar contigo, gracias por todo Kiyoshi

*Me levanto despacio*

-Nos vemos en clases?

*Río divertido al comprobar que huelo menos por el hielo en mí.* "Bien, así le será más llevadero estar cerca.*
*Me alegro al saber que, como siempre, le hablé sin necesitar algo de ella. Así soy yo... pero me alegra que me recuerde por eso.*
*Me levanto cuando dice que se marchará.*
- Seguro Leah... Te veo en clases. Puedes venir cuando quieras, eres bienvenida siempre.
*La acompaño a la puerta.*

*Me paro de puntillas depositando un beso en su mejilla y corro alejandome de su casa*

-Es buena persona

*Cuando estoy lo suficientemente alejada, me transformo y corro en medio del bosque hacia la push*